viernes, 10 de octubre de 2008

¿Coste cero?


Si los activos que van a adquirirse a la banca son colateralizables con el BCE pueden generar liquidez, entonces ¿para qué se compran?.

Por consiguiente, hemos de pensar que los activos que se van a adquirir no son colateralizables con el BCE, bien por su calidad o porque el BCE exige un aforo alto, es decir una cobertura de más del 100% de la liquidez que otorga. En cualquiera de los casos, por una u otra vía, se esta recapitalizando a las instituciones financieras con dinero del contribuyente, sin que se adquieran derechos económicos o políticos sobre los bancos.

En definitiva, el Tesoro está inyectando capital en las instituciones financieras con dinero del contribuyente sin contrapartidas en forma de dilución de los accionistas actuales.

Porque es con dinero del contribuyente, no nos engañemos ni nos dejemos engañar, lo de coste cero es un camelo. Dicen que es coste cero porque no afecta a los Presupuestos Generales del Estado de este ejercicio pero el servicio de la nueva deuda con la que se va a financiar la operación afectará a los Presupuestos del Estado de años venideros.

Decir que la operación tiene coste cero para el contribuyente es como aquel que piensa que comprarse un piso en el que existe un año de carencia de intereses y principal no tiene coste. Muy pronto descubrirá el incauto que en años sucesivos tendrá que pagar lo que tomó prestado. Del mismo modo, el contribuyente, o sus descendientes, pagará intereses y principal de la deuda nueva que financia la operación en los futuros Presupuestos Generales del Estado.

El coste es pues de 10000 millones de euros para el contribuyente, si este es el importe final del fondo. Si son los 50000 millones que anunciaron de euros entonces elcoste habrá sido de 50000 millones de euros. En roman paladino es como si a cada español le hubieran cargado con una deuda de 1000 euros.

Con esta operacion cada español está pagando 1000 euros para "ayudar" a las instituciones financieras, sin que le den ni una sola acción a cambio.

NADA DE COSTE CERO.

Pero es que, además, hay un efecto perverso que hace que la operación no vaya a dar liquidez a los bancos, al menos no en la medida en que estos creen.

Imaginemos que el Banco XX es el único banco y que recibe 10000 millones de euros del Tesoro como contraprestación de la adquisición de activos "por dicho valor". Inmediatamente o con anterioridad el Tesoro debe emitir nueva deuda por dicho importe para pagar a los bancos, para ello convoca una subasta de nueva deuda y los suscriptores ¿donde tiene la liquidez con la que compraran los títulos?.

Efectivamente, la liquidez está en los depósitos de los bancos. Entonces la banca perderá liquidez por 10000 millones y ganará por otros 10000 millones por el pago. Se quedará como estaba de liquidez con un balance menor. El efecto es la sustitucion de depósitos bancarios por adquisiciones de deuda pública.

Los bancos, el sistema, no se beneficiará de mayor liquidez a menos de que la compra sea por no residentes en España, lo que es más que dudoso. Los bancos solo se habrán beneficiado si la compra se hubiera hecho a precios superiores a los de liquidación.

No hay milagros, quien los quiera debe ir a Lourdes. Si se ha de ayudar a la banca, la única forma justa es intercambiar activos no colateralizables con el BCE por deuda publica nueva colateralizable en una relacion de intercambio que se acerque a "precios realistas de mercado" y, además, diluir parcialmente el capital mediante una emisión nueva que pase a ser propiedad del Estado y remunere al contribuyente por el riesgo asumido con los activos comprados. Esto permite, al mismo tiempo, tomar el control de los bancos aunque despues se vendan las acciones.

No es admisible ni moral que despues de esto existan fondos de pensiones de presidentes por importe cercano a los 100 millones de euros.

En el Reino Unido el Tesoro está tomando control de los salarios de los ejecutivos, porque ahora, quieran o no, no son Presidentes de compañías privadas muy bien pagados, son Funcionarios del Estado, mejor dicho "civil servants".

lunes, 6 de octubre de 2008

¿Se puede romper el euro?



¿Que sucedería si cada país miembro de la moneda única decide unilateralmente garantizar los depósitos de su sistema financiero?

Garantizar todos los depósitos de un banco solo es posible si se poseen al menos activos por valor igual o superior al activo de la institución financiera.

Así pues, si el garante se hace cargo como contraprestación de su obligación, de los activos de un banco, lo que ha ocurrido es que dicho banco ha sido nacionalizado. Garantizar los depósitos en un sistema financiero es nacionalizar el sistema financiero.

Si cada país toma esta medida, cada país esta disponiendo, entre otros activos de cada uno de sus bancos, de los depósitos del encaje en el BCE. Es decir, está tomando del BCE su parte.

Estamos liquidando el BCE y entonces.........¿dónde está el euro?.

A lo mejor esta siembra de desconfianza justifica lo que está sucediendo en el mercado de cambios.

Lecciones de la crisis


La principal lección que debe extraerse de esta crisis es que un encaje bajo tiene inconvenientes muy serios en economías desarrolladas.

Encajes excesivamente bajos como los "reserve requierements" de la Reserva Federal, o el coeficiente de caja del Banco Central Europeo generan un crecimiento exagerado del crédito y de la creación de dinero por parte de la banca a costa de jibarizar las herramientas eficaces en manos del Banco Central para vigilar la sanidad y la liquidez de las Instituciones Financieras.

Los depositos de encaje con el Banco Central son el mecanismo que determina el crecimiento del crédito. El crédito no crece por voluntad de los bancos, sino porque, si existe dinero disponible, se acaba prestando.

Pero no solo es cuestión de incrementar el encaje sino también de afectar al mismo todo tipo de depósitos o pseudo depósitos. Por ejemplo, depósitos a más de dos años o los fondos garantizados verdaderos depósitos de clientes que, sin embargo, no están sujetos al encaje.

El coeficiente de caja es tan importante como el mercado abierto para la gestión de la política monetaria, y debe ser utilizado no con la profusión del mercado abierto, pero si como herramienta estructural cuyo efecto en la contención del crecimiento del crédito es mucho más duradera.

El Banco Central Europeo no ha tocado el encaje desde su constitución, ha estado inyectando liquidez sin fin para quien la quería y, de ese modo, han crecido desmesuradamente los balances bancarios. Los bancos han prestado hipotecas en condiciones claramente irresponsables pero nadie puso remedio.

En otras palabras, hemos vivido una década de crecimiento sin freno del crédito que ha permitido un crecimiento económico sin control. Lo que vivimos ahora es un superfrenazo que hace que recordemos la Ley de Inercia de Newton a quienes estamos dentro del autobus, es decir a todos.

El Banco Central debe pisar el freno paulatinamente y no solo el acelerador aplicando políticas monetarias laxas.

La función de un Banco Central como dice el acta de fundación del BCE no es únicamente proteger el valor del euro mediante el control de la inflación. La verdadera función es defender el valor de los ahorros en euros, es decir defender el valor de la moneda y vigilar la sanidad de las instituciones financieras donde están depositados dichos ahorros.

Si el Banco Central Europeo mantiene la inflación en niveles del 1-2% bajo control pero el crecimiento del crédito pone en serio riesgo la sanidad de las instituciones financieras que son las depositarias de dichos ahorros, entonces no cumple con su cometido.

Otra lección de la crisis es que no se pueden separar politica monetaria y supervisión de las instituciones financieras. La Europa del euro necesita urgentemente un único organismo paneuropeo de supervisión bancaria. De este modo, se elimina de la supervisión injerencias politicas indeseable y nadie puede decir en la Europa de los doce que sus Instituciones Financieras son las más sólidas. Declaraciones como estas son de una irresponsabilidad que desborda cualquier medida.

Un Organismo Paneuropeo de Supervisión dentro del BCE, como no puede ser de otro modo, supone la irreversibilidad de la nueva moneda. En circunstancias como las actuales deben evitarse las tentaciones de algunos de segregar la politica monetaria saliendose del euro. Esperemos no tener que oir esto pero con este Gobierno todo es posible.